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Características de los textos narrativos

Debemos entender nuestra escritura como una enorme caja de posibilidades. Y así como se puede describir y explicar, también se puede narrar ¿Pero qué significa narrar? ¿Qué tipos de narración existen? ¿Cuáles son las características de un texto narrativo? Todo eso será contestado a continuación. Presentamos textos narrativos: definición, tipos y características. 

Características de los textos narrativos
Trata de hechos reales o ficticios Los textos narrativos pueden ser tan realistas como una noticia o un reportaje; pero también fantásticos como una epopeya (por lo menos ciertos sucesos en ella), un mito o una leyenda.
Puede tener uno o más personajes En principio una narración no tiene límites de personajes: puede ser uno como en una biografía, dos como el modelo de una fábula con enseñanza moral o varios en un cuento o novela.
La historia tiene un espacio La narración tiene un espacio, al que se puede aludir con más o menos concreción.
La historia tiene un tiempo La narración tiene un tiempo, al que se puede aludir con más o menos concreción.
Se narran acciones Una narración narra acciones, es decir, tiene una secuencia, un devenir, un movimiento. El modelo histórico es el de introducción, desarrollo y final.
El autor puede narrar y participar en la historia Quien narra puede ser un personaje más de la historia que narra o una suerte de ser por encima de todo lo que suceda en la narración.
Tiene un objetivo La narración puede tener diferentes objetivos: desde una novela que entretiene, una noticia que informa, un mito que da cuenta de cómo vino a la existencia algo (desde una práctica o un fenómeno natural hasta el universo en su totalidad) o una fábula que nos regala una enseñanza moral.

Qué son los textos narrativos

Un texto narrativo es un relato en el que se cuenta una historia, que ocurre en un lugar y en un tiempo concreto. En la vida cotidiana nos llenamos de narraciones porque comunicamos las más diversas experiencias con otros. Por supuesto, existen otras formas de exponer mezcladas (por ejemplo, la descripción de una casa o la explicación de un manual de instrucciones), pero la supremacía tal vez se la lleve narrar.

Narrar implica, como todo buen relato, una sucesión cronológica, un movimiento, seguimos que la cosa empieza, tiene un desarrollo o termina (por más que pueda quedar trunco). Y eso le da una característica muy notable, porque sabemos que cuando describimos, al contrario, todo se paraliza, hay un estatismo, nos quedamos en cualquier tipo de realidad.

Podemos decir, apelando a otra definición, que una narración es una secuencia, una manera de contar una serie de acciones o hechos, reales o imaginarios, que les suceden a las personas o a un personaje. 

Tipos de textos narrativos

Aquí podemos ensayar una pequeña tipología con diferentes textos narrativos, algunos propios de la literatura y otros no. A continuación presentamos algunos ejemplos:

  • Cuento: Es una narración breve, con pocos personajes y una única trama central que suele tener un rápido desenlace.
  • Novela: Relato escrito en prosa, algo más extenso, con una trama compleja y una variada cantidad de personajes.
  • Leyenda: Es un tipo de narración que combina hechos naturales con sobrenaturales, transmitidos de generación a generación y que forma parte del acervo de una cultura.
  • Mito: Esta es una historia fabulosa de tradición oral que explica el origen del mundo, del hombre o de cualquier objeto, forma parte de un tiempo sagrado y tiene una fuerte presencia de seres divinos.
  • Fábula: Historia breve, usualmente protagonizada por animales y que tiene su moraleja, es decir, deja una enseñanza moral.
  • Parábola: A veces es más breve que una fábula, con enseñanza moral y un gran uso de analogías y simbolismos.
  • Epopeyas: Escritas (aunque su trasfondo es oral), se tratan de relatos sobre la hazañas de un héroe, la gloria de un pueblo o un acontecimiento memorable.
  • Narraciones por fuera de la literatura: Existen narración por fuera de la literatura, como por ejemplo en el mundo del periodismo. Una crónica respeta el orden de secuencialidad de los hechos, una noticia da lugar al conocimiento de un suceso ocupando el primer puesto lo más importante o una biografía da cuenta de la vida de una persona.

Características de los textos narrativos

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A continuación presentaremos las características principales de los textos narrativos, para que el lector no solo comprenda, sino que pueda desarrollar los propios adecuadamente.

Hechos reales o ficticios

En los textos narrativos lo que se cuenta puede pertenecer al plano de la realidad, pero también pueden ser eventos enmarcados en la fantasía o la ficción. Una noticia es un ejemplo de narración realista, en cambio, una leyenda o un mito no lo es (por lo menos para nosotros seres occidentales, porque para sus creadores sí tenía una gran verdad atrás esos relatos).

Puede tener uno o más personajes

El texto narrativo no presenta límites en cuanto al número de personajes, ya que puede tener uno o varios. Estos pueden ser protagonistas o pueden tener una participación secundaria. Por ejemplo, una biografía suele tener un solo personaje o persona (o uno con un abrumador protagonismo respecto al resto), pero en un cuento o en una novela (esta más extensa) suelen haber varios.

La historia tiene un espacio y un tiempo

El texto narrativo se desarrolla en un espacio y tiempo determinado. Ese espacio y tiempo a veces no es sumamente preciso y ahí recordaremos la típica frase de un cuento infantil «érase una vez». Sin embargo, existen relatos con mayor precisión: una biografía nos habla de un lugar específico, un suceso histórico de un momento y lugar determinados. La precisión suele ser una cuestión de estilo dentro de la tipología narrativa. Sin embargo, hay un hecho: siempre existe un espacio y un tiempo donde los personajes desarrollan sus acciones.

Narración de una acción

Un texto narrativo describe acciones que realiza una persona o personaje dentro de una historia. Es decir, hay secuencia, movimiento, devenir. En un cuento se rescata a una persona o se vence a un ser maligno; en una epopeya tenemos la gesta de un héroe de antaño, en un mito la creación del universo o en una fácula una pequeña historia que da lugar a una enseñanza moral.

En todos los ejemplos dispuestos más arriba algo sucede, hay un comienzo, un desarrollo y un final, por más que haya creaciones que suelan ser algo más vanguardistas en su aspecto narrativo (hablamos de géneros algo más modernos).

El autor puede ser el narrador de la la historia y participar

No está para nada prohibido que quien narra los acontecimientos desde la primera, segunda o tercera persona (que da una sensación de mayor objetividad) también participe en los sucesos de la misma. Puede haber un deslindamiento entre autor y personaje, pero también una identificación absoluta.

Tiene un objetivo

Siempre un texto narrativo tiene un objetivo. Cualquier narración dentro del género periodístico tiene por finalidad brindar información, pero una fábula nos regala una enseñanza moral, un mito nos recuerda el tiempo más allá del tiempo y una novela puede tener simplemente un objetivo de entretenimiento.