El cuerpo humano (y el de otras criaturas) está compuesto por músculos, que son estructuras o tejidos existentes que a grandes rasgos generar el movimiento de contraerse y relajarse. Los músculos están compuestos por células denominadas miocitos. Sin embargo, existen diferentes tipos de músculos con sus funciones. A continuación presentamos tipos de músculos del cuerpo humano: información y cuadro comparativo.
Músculo esquelético | Músculo cardíaco | Músculo liso | |
Tipos de músculos |
Su movimiento es voluntario y son estriados en su figura. Se encarga de los movimientos del esqueleto axial y apendicular, además del mantenimiento de la postura y posición corporal. Cada músculo esquelético se fija en los huesos por medio de prolongaciones fibrosas denominadas tendones. La unidad fundamental de este músculo es la fibra muscular. |
Músculo de naturaleza estriada e involuntario en movimiento. Se encuentra únicamente en el corazón. Genera los movimientos mediante los cuales el órgano del corazón impulsa sangre a través del sistema circulatorio. Las células que lo componen están ramificadas y disponen de estructuras llamadas discos intercalares, que unen los extremos de dos miocitos colindantes para que el órgano se contraiga de manera sincronizada. |
Su movimiento es involuntario y no presentan estrías, de ahí su nombre. Se encarga de los movimientos de contracción y relajación propios de ciertos órganos del cuerpo. Se encuentra en la pared de estructuras internas huecas como tubo digestivo, útero, vesícula biliar, bronquios, etc. Las fibras musculares son más cortas, con filamentos internos gruesos y finos. |
Tipos de músculos del cuerpo humano
Los músculos del cuerpo humano son únicos en su morfología y cumplen diversas funciones. Sin embargo, en búsqueda de un mejor entendimiento, se puede hacer una división y clasificación en tres grandes músculos: esqueléticos, cardíacos y lisos. A continuación nos referimos en detalle a cada uno de ellos.
Músculo esquelético
Los músculos esqueléticos son más de 600 en el cuerpo humano. Están unidos a los huesos y los mueven al contraerse y relajarse en respuesta de mensajes provenientes del sistema nervioso. La función, entonces, es el movimiento del esqueleto axial y apendicular, además del mantenimiento de la postura y posición corporal. Gracias a los músculos esqueléticos, voluntarios y estriados en su anatomía, el ser humano puede mover el tronco y las extremidades, saltar, andar, correr, levantar objetos, mover los ojos, masticar, etc.
El tejido muscular esquelético está compuesto por células alargadas llamadas fibras musculares que tienen un aspecto estriado. A su vez, estas fibras musculares están organizadas en fascículos irrigados por vasos sanguíneos e inervados por neuronas motoras.
Hay más de 600 músculos esqueléticos, pero como ejemplos para sapiencia del lector podemos nombrar algunos de ellos: pectorales, serratos, bíceps, tríceps, intercostales, dorsales, romboides, aductores, gemelos, entre otros. Aquí realizamos una enumeración simple, no totalmente precisa y a fines de clarificación.
Músculo cardíaco
El músculo cardíaco naturalmente se halla en nuestro corazón, para ser precisos, en el miocardio. Este último comporta la capa media del órgano: aquí el músculo se contrae en respuesta a señales provenientes del sistema de conducción cardíaco para hacer latir al corazón.
Este músculo está conformado por células llamadas cardiomiocitos que tienen un aspecto estriado, pero con una estructura general más corta y gruesa. Los cardiomiocitos están ramificados lo que les permite conectarse y llevar adelante una contracción coordinada.
Entonces lo repetimos: el músculo cardíaco solo se halla en el corazón y su movimiento es absolutamente involuntario a diferencia de los músculos esqueléticos.
Músculo liso
El músculo liso a diferencia del esquelético no participa en los movimientos voluntarios. Se encuentra en la pared de las estructuras internas huecas, incluyendo la pared del tubo digestivo, vesícula biliar, vasos sanguíneos, bronquios, uréteres, vejiga urinaria y útero. También hay músculo liso en la piel, asociada a los folículos pilosos y también, aunque no se crea, en el ojo, con la función de contraer y dilatar la pupila y permitir el enfoque haciendo variar al cristalino.
Se llama liso porque microscópicamente si se los observa no presentan estriaciones. Estos músculos realizan grandes funciones y se contraen o relajan de manera automática en respuesta a estímulos nerviosos generados por el sistema nervioso. Las fibras del músculo liso son más cortas que el esquelético.
¿Y cuáles son las funciones específicas del músculo liso? Están vinculadas con las actividades de nuestros órganos, de ahí la enorme importancia. Algunos ejemplos: en la vejiga urinaria y en el útero permiten que se expandan o relajen de acuerdo a las necesidades, en el tubo digestivo posibilita las ondas peristálticas que movilizan nutrientes y alimentos deglutidos, en las paredes arteriales se asocian a la vehiculización de la sangre, etc.