La flora y la fauna son el conjunto de seres vivos que integran parte de un ecosistema. Si bien existen en todo el mundo, cada uno de las especies existentes de animales y vegetales se identifican con determinadas características especificas de acuerdo a la zona en donde se encuentren y las condiciones geográficas y climáticas de la región.
Tanto la flora como la fauna son organismos que fueron evolucionando con el paso del tiempo y se han ido adaptando a su entorno.
Flora |
Fauna |
|
Definición |
Son las distintas especies vegetales que existen en el ecosistema. |
Son las distintas especies animales que forman parte de un ecosistema. |
Clasificaciones |
-Flora Nativa o Flora Autóctona-Flora agrícola |
-Fauna silvestre o salvaje-Fauna domesticada |
Flora y Fauna
La flora y la fauna son organismos indispensables para poder mantener el equilibrio en la naturaleza y en el ecosistema. En varios casos se generan relaciones simbióticas entre ambos para prolongar su existencia y ambos son elementos bióticos de un ecosistema determinado, esto quiere decir que son elementos vivientes que integran un bioma de nuestro planeta.
Cuando hablamos de flora nos estamos refiriendo a toda la vida vegetal, esto es: árboles, arbustos, hongos, bacterias, fotosintéticas, entre otros. Cuando hablamos de fauna nos referimos a todos los animales que existen en el planeta: mamíferos, reptiles, insectos, aves, protozoarios, entre otros.
Tanto la flora como la fauna son formas de vida adaptadas a las distintas condiciones y particularidades del entorno en las que se haya cada una. Es decir dentro de la flora y la fauna se encuadran las diferentes especies y géneros de animales y de plantas que había en una zona determinada, sus conexiones y también las conexiones de ellos con su entorno.
La zona geográfica no es la única delimitación que tienen sino que se pueden extender a determinados hábitats inferiores o bien superiores. Por ejemplo si estamos analizando la flora y la fauna de una determinada playa, la flora y la fauna del mar atlántico y la flora y la fauna acuática, se trata de diferentes niveles de hábitats que incluyen o excluyen a ciertas especies dependiendo del nivel que se esté analizando.
El estudio de la flora y la fauna es muy importante para conocer e investigar sobre los ecosistemas y las diferentes relaciones que se llevan a cabo entre sus miembros. Además este estudio es de suma importancia para poder mejorar la conservación y la protección de los espacios naturales y su biodiversidad.
¿Qué es la flora?
Cuando hablamos de flora estamos haciendo referencia a las distintas especies vegetales que existen en el ecosistema. Dependiendo de la zona geográfica que estemos analizando existirán algunas especies u otras y cada una tendrá características particulares.
Dentro de la flora se incluyen a todas las especies vegetales que formar parte del ecosistema de una región determinada. Estas especies pueden pertenecer a esa zona ya se porque crecen de manera espontanea en dicho lugar gracias a un conjunto de condiciones o bien porque han sido cultivadas por la acción humana.
En este término se incluyen plantas, ya sea con o sin flores, semillas o frutos, especies vegetales acuáticas y toda planta que ayude a configurar la vegetación de una zona geográfica determinada.
El termino flora viene del latín “homónimo” que se atribuye al nombre de la diosa de la primavera. Si bien se suele utilizar los conceptos de flora y vegetación como sinónimos, en verdad ele termino flora hace referencia únicamente a las especies, en cambio vegetación incluye a la distribución de esas especies en un determinado espacio.
Tipos de flora
Dentro del concepto de flora podemos encontrar dos grandes clasificaciones:
–Flora Nativa o Flora Autóctona: esta clasificación refiere a las especies vegetales que son propias de una región especifica, es decir la flora nace en dicha zona de forma natural. Las plantas autóctonas están muy relacionadas con el ecosistema en el que habitan, se relacionan con las aves y con los insectos con los que comparten su hábitat.
Algunos ejemplos de flora autóctona: El ombú que es propio de la Pampa, la camelia japónica que es originaria de Japón.
–Flora agrícola: Esta clasificación refiere a las especies vegetales que se encuentran en una zona geográfica pero no por nacimiento sino por acción humana. Un claro ejemplo de este tipo es el cultivo de té en Argentina, si bien el árbol de té no es autóctono de dicha zona, sus semillas fueron cultivadas con objetivos de explotación comercial.
Durante un tiempo determinado se mantuvo una tercera clasificación que era la denominada flora arvense, en dicha categoría se agrupaba a las plantas que eran consideradas como maleza. Esta categoría luego fue dejado de lado, ya que con el avance de los distintos estudios se confirmo que cumplían una funciona fundamental en el ecosistema.
¿Qué es la fauna?
Se conoce como fauna al conjunto de especies animales que habitan en una zona geográfica especifica en un mismo periodo. Al igual que con la flora, en la fauna se llevan a cabo distintos tipos de relaciones que son fundamentales para poder mantener equilibrio de la naturaleza.
Dentro del concepto de fauna podemos encontrar dos grandes clasificaciones:
-Fauna silvestre: dentro de esta clasificación que también se la conoce como fauna salvaje se incluyen a todas las especies de animales que son autóctonas y propias de la zona en la que se encuentran. Este tipo de fauna no necesita del ser humano para poder alimentarse y desenvolverse en el medio en el que se encuentra.
Ejemplos de fauna silvestre: la guacamaya escarlata especie nativas de México, el surubi y el dorado en las zonas de la región mesopotámica de Argentina.
-Fauna domesticada: en esta clasificación se incluye a las especies de animales que se encuentran en determinadas zonas geográficas pero porque el ser humano lo han introducido allí. Por lo general los humanos suelen realizar estas acciones con fines económicos en el sector agrícola y ganadero.
En algunos casos esta domesticación no suele traer consecuencias pero en otras especies terminan ocasionando un desequilibrio en el ecosistema y se las denomina como especies invasoras, las cuales luego son muy difíciles de erradicar.
Además existen otros tipos de fauna que varían según las zonas geográficas y regiones de la tierra en donde se encuentran: Fauna marina, fauna avícola, fauna ictiológica, fauna nociva, entre otras.
Ejemplos de fauna domesticada: ovejas, ganado vacuno, caballos, gallinas, perros, gatos, entre otros. Son especiales que se han ido introduciendo en muchas regiones.
Un ejemplo de especie invasora es el hurón en Chile. Esta especie fue introducida intencionalmente introducida al país. Esta especial ha provocado grandes destrozos en el ecosistema y ha perjudicado a otros animales como al conejo y a la gallina.
Las diferentes relaciones que se llevan a cabo entre la flora y la fauna en un ecosistema son fundamentales para que se pueda desarrollar la vida en una zona determinada, ya sea una selva, un océano, un desierto.
Dentro de la flora podemos encontrar a organismos productores, fotosintéticos o no, y dentro de la fauna encontraremos a los consumidores de los distintos niveles de la organización trófica.
Tanto la flora como la fauna son indispensables para poder estudiar el ecosistema y las diferentes regiones en todas sus perspectivas.